¿Y que dijo el otro?

No soy y estoy lejos de ser una peroidista consagrada, quizá algún día. Entre a estudiar periodismo porque quería especializarme en lo deportivo; pero el tiempo y la pasión por el tablón me han hecho dudar hasta el punto de optar por otros caminos. Sin embargo, he disfrutado realizando entrevistas para ramos de la universidad ó para Ceatolei.cl... con el proyecto nuevo (¡ojalá resulte!) seguiría vinculada a lo deportivo, ahí veremos que pasa.

En los próximos post, subiré entrevistas y árticulos que he realizado en este tiempo. La mayoría son relacionadas con Católica (bah, que raro no?), pero parto con la primera, realizada a unos de los grandes personajes del periodismo deportivo de nuestro chilito; uno de verdad: Don Sergio Brotfeld.


Sergio Brodfeld crítico y certero.

‘EL FÚTBOL CHILENO ESTA EN QUIEBRA’
Pamela Venegas.
(2003)

Clubes al borde del colapso financiero, dirigentes que ‘creen saberlas todas’, técnicos soberbios, la aparición de las barras bravas, y la perdida de calidad del espectáculo son las diversas aristas que nos señala Sergio Brodfeld, actual comentarista de Al Aire Libre de radio Cooperativa, para explicar la actual crisis del fútbol criollo, en la cual sólo la selección de Juvenal Olmos pareciera entregar un respiro momentáneo.

Habla con total propiedad y sin apuro alguno del ayer y hoy del deporte chileno. Sus 52 años ligados a él ya sea desde el periodismo deportivo o desde lo organizacional, partiendo de la transmisión radial del Mundial de 1962 celebrado en nuestro país, pasando por el mítico ‘Show de Goles’ de UCV televisión, (en el cual fue conductor por cerca de 10 años) hasta su participación en Digeder como Subdirector (1990-1994) y en el Comité Olímpico, hacen de Sergio Brotfeld una persona más que idónea para analizar el momento presente de nuestro balompié, aquél que parece sumido en un pozo sin fondo, en una crisis sin solución, que sin embargo se arrastra desde los principios mismos del ‘deporte rey’ en nuestros canchas. Un cambio de mentalidad, planificación y colaboración de todos los estamentos pareciera ser la receta para ver la luz al final del túnel.

¿Por qué creé usted que se alejó la gente de los estadios?
En primer lugar, la poca claridad futbolística, se ha retrocedido como espectáculo. Segundo, desgraciadamente la aparición de las barras bravas. La agresión que existe permanentemente. Y se agrega en esto el mal escenario deportivo. ¿A quién le agrada ir a una cancha de fútbol con la inmundicia que significan los recintos deportivos, donde no hay ninguna preocupación por el espectador? Son escenarios abiertos en que cada uno hace y consume lo que quiere, hay un desorden absoluto. Además los costos. El otro día pedían por una galería 4 o 5 mil pesos. En cambio un cine puede costar 1500, 2000 pesos. La gente va a ver la película que quiere, se va a entretener y es limpio.

Para controlar a las ‘barras bravas’ ¿se castiga a justos por pecadores?
¡Pero es evidente! De mala manera hay que ir a los estadios y ver de cerca de estos jóvenes que son de una agresividad incontrolable, gente que ni siquiera va a disfrutar un espectáculo, a ver a su equipo. Ellos van a causar desmanes.
En realidad este es un problema que ha tomado mucha fuerza y las barras, aunque los dirigentes digan que no, están protegidas por ellos. Son parte de lo que es ‘la fuerza de lucha’ que a veces tienen los dirigentes para conseguir sus propósitos.

¿Son una especie de guardia pretoriana entonces?
Exacto. Hace mucho tiempo –hoy se lavan las manos- la gente de la directiva les daba entradas. Ahora igual entran por la fuerza.

Acerca de los manejos dirigenciales, tres de los clubes mas grandes del fútbol chileno están en muy mal pie económico: Colo Colo, Cobreloa y Universidad de Chile.
Habrán uno o dos clubes que estarán bien. En general el fútbol chileno y el fútbol mundial está en quiebra. El fútbol inglés se había salvado, pero ahora fuera de un par de equipos están todos en muy mala situación económica. ¡España es igual! Llegó el sistema de sociedades anónimas y solamente tres clubes quedaron fuera de la exigencia: Real Madrid, Barcelona y Atlético de Bilbao. Pero el resto estaban tan quebrados, que el gobierno español tuvo que intervenir y saldarles toda la deuda, una cantidad impresionante, para que partieran de cero. Y recién establecieron lo que eran las obligaciones y lo que eran las Sociedades Anónimas.

¿Debería intervenir el gobierno chileno?
No. ¿Por qué va a pagar el gobierno por los errores de los dirigentes?
¿Quién tiene el control de esto? Se ha visto fútbol profesional con 800 ó mil 200 personas.

¿Qué opina de Reinaldo Sánchez?
No me gusta.

¿Por qué?
No me gustan las actitudes patronales.

¿Usted cree que la ANFP –con él a la cabeza- no es un organismo serio?
Pero si nunca lo ha sido tampoco. La ANFP y las federaciones deportivas están en problemas por una razón: el dirigente chileno cree que las sabe todas. El dirigente nacional es presidente, secretario, planificador, contralor, técnico... (coloca la voz firme y frunce el ceño). En lugar de señalar pautas, él asume como si fuera el único que conoce y de allí vienen todos los problemas. ¿Quién planifica el deporte en Chile? Se juega solamente, – y se los digo con la experiencia de mis años en Digeder y también en el Comité Olímpico-, cada federación trabaja en función de determinada actividad. Ahora, se dice que Chile debiera tener dirigentes rentados, es la ultima.

Está el caso de Universidad Católica, que tiene a Andrés Tupper.
Pero eso es distinto porque es una Fundación. El caso de la Católica es bien especial. Aunque ahora constituyan una serie de comisiones asesoras, los que resuelven en definitiva siempre van a ser los integrantes de la Fundación, quienes no son elegidos por votación, pues representan a un sector determinado de la Universidad.

Un ex técnico cruzado es el actual timonel de la ‘Roja de todos’, ¿qué opina de Juvenal Olmos? ¿Es el entrenador indicado para llevar a Chile a Alemania?
Creo que sí. A mi me gusta el trabajo de Olmos, lo encuentro un entrenador muy serio, muy estudioso. Creo que es uno de los que siempre tiene interés por progresar.

En general en Chile -y no sólo hablo de nuestros técnicos, sino de una parte de nuestra idiosincrasia- somos un poquito soberbios en el conocimiento. Creemos a lo mejor que sabemos más de lo que realmente somos capaces de aportar. El técnico no es un estudioso relativo, no vivimos ni valorizamos la experiencia externa. Hay dos frases que caracterizan al entrenador nacional: ‘¿Que me va a enseñar a mí?’ o ‘¿A quién le ganó?’ Son frases ‘cliché’.

Siempre se dice que les cuesta a nuestros muchachos ir a jugar en el exterior, porque estamos en una difícil situación geográfica. Pero también es falta de nuestros entrenadores, son pocos los que saben, son pocos los que tienen la posibilidad de visualizar que se está haciendo en el mundo entero, en el mundo deportivo.

¿Quiénes se ajustan a ese perfil?
Hay varios, Jorge Garcés, ‘Nacho’ Prieto, Jaime Pizarro.
Actualmente los clubes se están renovando. Con Meneses, con Fernando Díaz, casi todos están buscando esta nueva orientación joven, que está con otra disposición. Se da que estas renovaciones se basan en cambios que son fundamentales.

¿Y Nelson Acosta? Hace un tiempo dijo que él era el entrenador más exitoso del fútbol chileno.
Es un gran entrenador.

Los jugadores lo sindican como un gran motivador.
Exactamente. Sabe ver el fútbol, otro aspecto muy importante para poder hacer los cambios. El problema que a lo mejor la base cultural no es la mejor para transformarse en el ‘maestro’ de los demás.

¿Quien sería el gran entrenador, el maestro en Chile?
El gran entrenador fue Fernando Riera, indudablemente.

¿Por qué?
Porque además de tener una gran cultura, tenía todos los estudios y trabajó en todos los países donde hubo un desarrollo futbolístico notable como Francia, Portugal, Argentina. Después perdió interés en proyectarse, pero cuando Fernando estuvo en la Federación de Fútbol -a cargo de la selección- hizo los mejores cursos (para formar entrenadores) y grandes instructores vinieron a nuestro país.

Para terminar, ¿Alguna reflexión sobre el futuro?
Aquí son solamente deseos. Mientras no cambiemos un poquito la mentalidad como país, mientras no mediemos ante las autoridades el respaldo que necesita el deporte para desarrollarse, vamos a ser siempre mediocres. El deporte debiera ser incorporado como parte fundamental del desarrollo de nuestra juventud, porque teniendo buenos deportistas, tenemos una serie de mejorías en todos los sectores.
Son muchas las lacras sociales en que el deporte puede servir para irlas eliminando. Lamentablemente tenemos que estar, después de tantos años, golpeando todas las puertas para convencer de lo que es la ventaja de practicar un buen deporte. Que alguna vez se entienda, que del deporte nacen obligaciones y beneficios para todos.

Aproximadamente hace 10 años, la Tv con cubierta de madera que había en mi casa, pasaba imágenes de un extraño ser, que claramente estaba fuera de sí... Larga melana, media rulienta y deshaseada, bermudas color milico, una polera negra y una camisa de leñador.
Este extraño ser se balanceada como un mono encima de un parlante, varios metros más arriba del suelo, que estaba atestado con gente vestida de manera similar a la de él...

De fondo sonaba una melodía que cualquier papá calificaría de estruendosa. El melenudo no era Mike Patton, a quien había visto agarrarle su parte posterior al cuasi vitalicio animador del Festival de Viña años antes... era segunda vez que miraba la Tv y quedaba tan perpleja con la imagen de alguien. Pero la melodía, envolvedora de oídos ansiosos de absorber música que no fuese floklórica ó de la 'Nueva Canción chilena', era candenciosa, atrayente y la voz era ronca, con unas variables que le daban autoridad y credibilidad de lo que estabas escuchando.

"Even flow, thoughts arrive like butterflies" decía el personaje..."Oh, whispering hands, gently lead him away Him away, him away..." Parecia suplicar..."¿¡quien chucha son estos weones!!?"me dije. Necsitaba saberlo todo: quienes eran, de donde venía, como se llamaba el disco y lo mas importante; donde podía encontrarlo.

Mientras pensaba si algun conocido o vecino poseía esta nueva revelación, el personaje melenudo gritó desde sus entrañas "YEAH!!!"

Pegada a la Tv, trataba de dilucidar lo que tenía al frente, lo que se me estaba presentando. Derrepente hay una interrupción en el video... el personaje melenudo se balancea, mientras la guitarra hace una especie de 'pausa tensa'.... fue ahí, cuando el melenudo se lanzó -sin miedo y prevención alguna- de un tremendo parlante (dos de esos gradontes) nada menos que a donde estaban los 'fans'!! (me carga esa palabra pero bue...)

Este ser estaba trastornado...definitivamente tenía que saber quien era. A los pocos minutos supe que era Eddie Vedder, que el grupo se llamaba Pearl Jam y que eran 'grunges' igual que Nirvana y Soundgarden. No paso una semana antes de tener, en un cassete Sony con calcomanía celeste y verdosa -incluso con líneas para anotar detalles- la copia pirateada de 'Ten', el álbum de estos 'muchachines'.

Pensar que desde eso han pasado más de 10 años...y ahora qudan cuarenta y algo de días para verlos en vivo y en directo. Uf!!!!!

No se si alguna vez se han detenido a analizar, la inmensa cantidad de particulares personajes que pululan por el centro de Santiago. Es un fauna sin fin de locos, borrachos y pintamonos que muchas veces pasan desapercibidos antes nuestros ojos.

Mi teoría dice que si uno camina pensando en cualquier cosa -es decir con la cabeza ocupada en quien sabe que- es más difícil detectarlos, lo mejor es sentarse en algun lugar a observar.

Ayer iba caminando con unos amigos y pasamos por la Plaza de la Constitución. El objetivo era ver una exposición de fotos, pero cuando llegamos, nos fijamos que había toda una banda militar y su buen escuadrón formado esperando a alguien... "Debe ser importante si le trajeron una banda" -dijo mi amigo Pato-(que no es el protagonista de la tan polémica canción de los Chancho en Piedra), asi que nos sentamos a mirar quien iba a salir por esa puerta...

Pasaba y pasaba gente; nos entreteníamos mirando lo aburrido que estaban los milicos de estar parados: unos se rascaban la pierna con la bota, otro le contaba a un amigo una historia semi-fantástica de acción -por lo exagerado de sus movimientos- y adentro los pacos de la guardia mantenían una situación no muy distinta: aburridos como ostras.

Mientras nos reíamos de todos esos detalles (y en especial del paco más pequeño, que tenía como misión tocar la trompeta...saque ud. sus conclusiones)comenzarón a a salir personas de la casa de gobierno, pero simples mortales.
Había varias personas entre descansando y copuchenteando -como nosotros- por lo que daba la sensación de que cada funcionario se sentía saliendo de un reality. Algunos daban pasos glamorosos, llenos de estilo; otros lo intentaban, como la señora que saió cual Lady Dy arreglándose el pañuelo...el problema fue que no se fijo que había un hoyo -si señores, ni en la Moneda se salvan, es un mal nacional que ha destronado al cólera- y tropezó con lentes, cartera y pañuelo incluído. Menos mal que un paco de la guardia la auxilió y no cayó de bruces al suelo...nosotros nos apretábamos la guata de la risa.

En eso, sentimos unos aplausos.. "clap, clap, clap, clap", eran fuertes y decididos, pero se notaba que venían de una persona. Era un hombre de unos 28 años, afirmado a una de las rejas papales. No decía nada, sólo sonreía y aplaudía. A toda persona que saliera...estuvo así media hora más menos.

Lo más gracioso es que miraba para todos lados y aplaudía, como queriendo decir "¡Hey uds. acompáñenme!" Pero mira que curiosidad... cuando salieron los invitados a quienes la bandita estaba destinada, no emitió ni un sólo 'clap'.

¿Quién sería este extraño personaje? ¿Un admirador de la burocracia actual?¿Algún pariente de los de la bandita? ¿Un vago sin nada mejor que hacer?

Salió alguien relacionado con Francia (nunca me entere de quién era exactamente) y la banda interpretó La MArsellesa; no había nada más que ver, asi que nos retiramos, pero el "Aplaudidor" seguía ahí, esperando a su estrella.

Se acabó el tiempo para descubrirlo...tuve que marchar.

1 P.M, entre corriendo al Hoyts de la Reina. Subí la escalera mecánica echa una bala y llegué casi sin aire al puesto que tiene Ticketmaster en el 2ª piso. No había absolutamente nadie...

Con el útlimo aliento, lancé un "¿Hola?" De una puerta pequeña, salió una niña con una cara y un ánimo impresionantes...se notaba que esta "super contenta" trabajando ahí. El ánimo que derrochaba por los poros estaba para revivir a 200 payasos muertos. Claro que si, era fácil imaginarse el cuadro: ella contando chistes a destajo y los payasos saliendo de sus tumbas a puras carcajadas. Colacamos a esta chica en una junta de depresivos y salen todos cagados de la risa...

Ya sigo con la historia. Había logrado tomar algo de aire y le pregunto "¿Galerías para Pearl Jam?" -los egundos que pasaron entre mi pregunta y la respuesta fueron eternos, en mi angustia por quedarme afuera, vi toda la situacion en pequeños cuadros lentos, como en Matrix- "Si, cuantas quiere?", me respondió con un intento d sonrisa, que se parecía más a las intervenciones que hacía el Huasón a "sus chicas" en la primera Batman.

El alivio que sentí cuando escuche el "sí" fue inmenso...fue como sacarme todo Los Andes de mis hombros... la sóla idea de quedarme sin ver a uno de los iconos del grunge, merecía que me tirara de un puente.

"Quiero 3", le dije aún media confunsa por el efecto del "sí". Y es que la noche anterior no puede dormir, pensando en que me había demorado mucho, que la debía haber comprado el sábado. El cagazo me vino cuando Pablo me dice que quedaban 400 cancha en Falabella; ¡casi me morí! Llamadas desesperadas a mis compañeros de recital: "¡Que chucha hacemos, que chucha hacemos!" Fue la frase del día. Frenética tarde en busca de recursos - de "dineros frescos" como decía un chanta dirigente de fútbol chilensis- hasta que la plata llegó.

Bueno, la animada chica (aclaro que no tengo animosidades en su contra, sino que es cómico resaltar la nula importancia que le dió a algo demasiado importante para mí) Apreto un botón y sacó 3 papelitos rectagulares; yo le pase la plata y aquí vino el momento mágico: ¡las 3 entradas estaban en mi mano! ¡Si mierda, esta asegurada para Pearl Jam! Sentí como se me hacía un nudo en la garganta, como me temblaron "las cañuelas", como mis ojos -no muy acostumbrados a ello- se me llenaban de lágrimas.

Me sentí observada que decidí salir del cine; lo cual se me hizo un poco esquivo, porque me di 400 vueltas antes de encontrar la escalera correcta... Se me cayò la mochila, el celular, la billetera, unos papeles, despues quería bajar pòr donde se subía... era un desastre, un verdadero manojo de nervios.

SAlí del cine y luego de un chilenismo encendí un cigarro. Fóforos de mierda no encendían nunca...Ya, mi cara era una sonrisa.. naah, YO ERA UNA SONRISA CAMINANDO. Llamé a la Maca, no estaba, mande un mensaje a Pablo pq necesitaba decirle algo a alguien en ese instante, era demasiada mi felicidad!!!.

Caminé por Vespucio hacia Plaza Egaña y en mi cabeza comenzaba a sonar todo el "Ten" de una vez... Se sucedían Oceans, Even Flow, Jeremy..."ohohohoh I'M STILL ALIVE ee ahhh ohoh I'M STILL ALIVE". Increíble. Adrenalina pura en mi cabeza y en mi sonrisa.

Pensar que falta un mes y varios días... ¿Cómo andaré cuando falte una semana?

"¡Faltan 5, vamos mierda!", se escuchaba en mi casa hoy, tipo 4 de la tarde...
jugaba la Cato con la U de Conce y el Tati Buljubasich esta en cuenta regresiva para batir el record del Loco Fournier...todo eran nervios, la gente de la UC empezo a cantar y cuando se cumplió el tiempo, se escucharon tronadores y bengalas: "¡¡¡TATI HOMBRE RECORD!!!", decia el relator. Fue felicidad máxima, de verdad el Tati es un arquerazo y una muy buena persona, bien por él y por la Cato.

Mal que mal, no cualquiera logra 1053 minutos con valla invicta en torneos nacionales, ¿o no? Por algo el record no se rompía desde el 85'.

De muy chica (de edad porque de porte siempre lo fui jajaja) me gustó jugar al arco. Un dìa estaba viendo un partido por televisión y J.M (Julito Martinez) dice "es el arco, el puesto màs ingrato del mundo",quedè fascinada y enamorada del puesto inmediatamente, fue un flechazo. Desde ese instante, cada vez que daban un partido por Tv ò iba al estadio, me fijaba obsesivamente en el guardian que se colocaba bajo los tres palos. Es literalmente, una persona contra todo el mundo; una sola persona, con no más defensa que un par de guantes, tiene que evitar que una esfera de cuero -que a altas velocidades duele su impacto- entre a un rectángulo 10 veces más grande que uno.

Jugar al arco es un suicidio, lo sé. En un minuto eres la héroe, has tapado todo...pero en un segundo cometes un pequeño error que puede costar un partido, un campeonato; en un mal cálculo se te pueden ir 6 meses a la basura. Es estresantemente delicioso.

Me encantaba ver jugar a Chilavert, esa capacidad de mando, de salir jugando, de hacer goles increibles -cómo el que le hizo a River desde la mitad de la cancha-, lo malas pulgas que era. Me acuerdo de Toledo (antes que se lesionara, despueés nunca fue el mismo) cuando volaba y se suspendìa en el aire -si señores, a lo MAtrix-, de Cornez cuando salía a achicar con cada celula de su cara sin que se le alfojaran las piernas en lo más mínimo, me acuerdo y que lindo es acordarme, de Wirth, cuando atajó ese penal en Cali, en el minuto 90', con todo el estadio lleno y la deseperación que sentiamos los hinchas cruzados a muchísimos kilómetros...se nos escapaba la ilusión...pero Don Oscar voló como nunca y atajó ese tiro; sencillamente notable.

Ser arquero es la máxima expresión de valentía, de locura, de irresponsabilidad ¿Quièn puede ser tan loco como para echarse un peso tan grande en los hombros?.

Ser arquero es exigir a tus sentidos lo máximo, es estar alerta en todos los frentes, es saber cuando esperar y cuando atacar, es saber retar y motivar a tus compañeros... ser arquero es una de las cosas mas lindas que me han pasado en la vida.

Me dan ganas de volver a jugar...

Ahi tengo guardados mis guantes y la camiseta 16 amarillo con negro que dice "PAMELA". En todos los años que jugué, defendí 3 camisetas: la de mi colegio, la del Sagrado Corazón (cuando jugaba en la Liga adulta de Santiago) y la de Chile. Mi genio y mi orgullo me traicionó muchas veces, costándome salir de la selección incluso -un recuerdo muy amargo- pero igual no me arrepiento de nada. La adrenalina que siente uno al defender la línea de fuego entre la gloria y la derrota, es impagable.